martes, 21 de noviembre de 2017

Brócoli gratinado con bechamel y beicon

El brócoli es el ingrediente principal de nuestro plato de hoy. De excelentes propiedades para la salud por tener acción preventiva sobre el cáncer -principalmente el de cólon- además de aportar cantidades significativas de hierro, por lo que es un alimento ideal para prevenir la anemia. Proporciona, además, calcio, fitonutrientes y varias vitaminas y minerales, incluyendo las vitaminas C y E.


Una porción media de 90 g de brócoli aporta 2 de los 15 mg de hierro al día recomendados para las mujeres. En cuanto a los hombres, proporciona el 25% de la cantidad diaria aconsejada. 


Cuando vayas a comprar brócoli, hay que elegir los ejemplares color completamente verde y compactos. Si no lo vas a consumir de inmediato, puedes conservarlo en la nevera unos días sin lavar. 


Suelo prepararlo al vapor o hervido para luego consumirlo aliñado con un buen chorro de AOVE y vinagre, en ensaladas, macerado o al horno gratinado como es el caso. Crudo mantiene todos sus nutrientes y al vapor sería la segunda opción más sana y recomendable.




Ingredientes:



Brócoli (preferiblemente fresco, aunque congelado resulta espectacular)

Beicon en pequeños tacos

Salsa bechamel

Queso rallado para gratinar



Al lío:



Cuece el brócoli separado en arbolitos al vapor o en una cacerola con abundante agua salpimentada al gusto. Sacar cuando esté al dente y dejar escurrir.


Ponemos el brócoli en una cazuela de barro colorao de Bailén, le añadimos la salsa bechamel, el beicon y por último el queso rallado. Lo ponemos a gratinar en el horno un ratico.



En apenas media hora tendrás un magnífico y rico plato al que nadie se podrá resistir por muy poco que le gusten las verduras. Preguntadle a mi hija mayor.


Salud!!

sábado, 10 de noviembre de 2012

Costillas de ibérico al horno

La recetilla de hoy os va a encantar. Apenas unos ingredientes y unos minutos para su preparación antes de asar en el horno. Los más peques de la casa se chuparán los dedos y los mayores, ni os cuento.
 
Toma nota de los ingredientes:
  • Costillas ibéricas de cerdo
  • Unos ajos, tomillo, orégano, pimentón dulce, 1 pastilla de caldo de carne, y pimienta negra molida
  • Papas del terreno
  • Aceite de oliva virgen extra de los olivos de Jaén
  • Un par de cervezas (una para el asado y otra para el cocinillas)
     
 
 Al lío:

Lo primero que vamos a hacer es coger un mortero de los de toda la vida con unos ajos pelados, el tomillo, el orégano una cucharada generosa de pimentón dulce (si te gusta el picante, tú mismo) y una pastilla de caldo de carne. Majamos bien y añadimos un vaso de AOVE. Mezclamos bien el majado y reservamos.

Pelamos unas papas del terreno, las lavamos y las cortamos en rodajas de un centímetro y pico para que salgan gordicas.
 
En una fuente de horno, ponemos una cama de papas de fondo y sobre ellas ponemos las costillas. Rociamos todo el conjunto con el majado y lo dejamos macerar a su amor un par de horitas en el frigorífico.
 
Una vez pasadas las dos horas, calentamos el horno a 180/200º y metemos las costillas. Las dejamos asar unos 40/45 minutos transcurridos los cuales le vamos a añadir un biscuter de cerveza (se puede poner un vasito de vino blanco si  no te gusta el toquecillo amargo de la cerveza). Dejamos asar otros 40 minutillos y las costillas estarán de lujo.
 
 
Sería recomendable tener a mano un buen pan y un caldo tinto para acompañar.
 
Salud!!
 


 

viernes, 24 de diciembre de 2010

Besugo al horno al estilo de mi abuela

El besugo es uno de los pescados más apreciados en nuestra tierra, y seguro ha formado parte de muchos de vuestros menús típicos de Navidad.

En nuestras lonjas y mercados encontramos besugo de diversas procedencias. Aunque, desafortunadamente, es un pescado que ya no es tan abundante como antaño. Debemos distinguirlo entre otros pescados que se le asemejan y que en ocasiones se venden en pescaderías y mercados por besugo, como son la breca o el bicudo, que aunque siendo en estas especies su carne exquisita, no alcanzan la calidad y el sabor del besugo.


Podemos distinguir en el besugo una mancha negra característica en sus sus costados, que puede aclararse e incluso desaparecer al ir perdiendo frescura o en piezas muy pequeñas. La breca o el bicudo, carecen de la mancha negra, el cuerpo es más alargado, la cabeza más puntiaguda y su color difiere del besugo.

El modo más habitual de prepararlo es al horno, con cebolla cortada en juliana, tomate, pimiento morrón, ajo, un poco de vino, aceite de oliva y un chorrito de limón, y sin olvidarnos de las patatas. Se puede hacer tambien besugo a la sal o a la espalda. Otra forma sencilla de preparar es a la plancha, con sal, aceite y limón.


Ingredientes


  • 1 Besugo de unos dos kilos o un par de piezas pequeñas
  • Aceite
  • Cebolla
  • 1/4 kg.Patatas
  • Pimiento verde
  • Tomate
  • Vino blanco
  • Limón
  • Caldo de pescado
A guisar

En una besuguera, se rehoga muy ligeramente la cebolla, el tomate y el pimiento picado en juliana. Una vez rehogado, se cubre con las patatas cortadas en rodajas finas y se sazona todo con sal.


Se coloca encima el besugo al que le habremos realizado unas incisiones con un cuchillo y se le introducen medias lunas de limón. Se mete en el horno previamente calentado a unos 180 grados. Cuando esté el besugo a medio asar (15/20 minutos), se moja con el vino blanco y algo de caldo de pescado.


Se deja terminar de asar tomando de vez en cuando con una cuchara salsa del fondo de la fuente y regar con ella el pescado, para evitar que se seque y para que vaya tomando el sabor de los ingredientes. Se presenta en la misma besuguera.

sábado, 30 de octubre de 2010

Berenjenas gratinadas

Las berenjenas quedan de lujo parar acompañar o mezclar con otros alimentos y servir gratinadas, uno de los modos en los que mejor se aprecia su sabor. Esta es una de mis recetas favoritas, además de las fritas y acompañadas de salmorejo cordobés o una reducción de Pedro Ximénez.

Las berenjenas pasadas por harina y  fritas en aceite de oliva virgen extra de Jaén acompañadas con miel de caña es otro delicioso manjar que no debes dejar de probar, te sorprenderá, seguro.

No obstante, hoy te propongo que las cocines gratinadas con gambas, jamón serrano y salsa bechamel. Un lujo para el paladar.

Ingredientes:
  • 2 berenjenas
  • Jamón serrano en dados
  • Gambas crudas
  • Aceite de oliva virgen extra de Jaén
  • Sal
  • Harina para rebozar
  • Salsa bechamel
  • Queso rallado para gratinar

Al lío:

Pelar y cortar en rodajas todas iguales las berenjenas. Pasar por harina y freír en el aceite de oliva bien caliente.Poner las rodajas de berenjena fritas en papel de cocina para evitar el exceso de aceite. Salpimentar.

Colocar en una fuente de horno una capa de berenjenas fritas. Cubrir con el jamón serrano en dados. Colocar otra capa de berenjenas. Cubrir con las gambas. Colocar otra capa de berenjenas. Cubrir con la salsa bechamel. Añadir queso rallado por encima y gratinar unos minutos.

Un blanco semi dulce conbina de maravilla con esta receta.

Salud!!


jueves, 28 de octubre de 2010

La verdad sobre los embutidos

Salchichón, chorizo, jamón, lomo… Solemos acusar a los embutidos de todos los males pero, a pesar de lo que se dice de ellos, tienen cosas buenas. Aquí os dejo un artículo publicado en el portal yahoo  en el que se ofrecen datos útiles para valorarlos en su justa medida.



Todo depende del tipo de embutido! La charcutería es muy variada y eso hace que el contenido en grasas oscile entre unos productos y otros. El jamón cocido, y sobre todo el desgrasado, aporta menos de 115 calorías por 100 gramos, menos que el pollo. El jamón crudo contiene entre 200 y 250 calorías por 100 gramos, menos que una bolsa de patatas fritas. El paté y el salchichón aumentan considerablemente la suma: la mayoría de los patés contienen entre 300 y 320 calorías por 100 gramos. Contrariamente a lo que podría pensarse, el embutido más calórico es el salami, con 550 calorías.

En conclusión, si los variamos y si limitamos los más calóricos a las grandes ocasiones, los embutidos no deberían ser un problema.

Sólo contienen grasas saturadas

La charcutería aporta alrededor de un 40 por ciento de ácidos grasos saturados. En su mayoría están compuestos de ácidos grasos insaturados. Cerca del 50 por ciento de estos lípidos son ácidos grasos monoinsaturados. Los embutidos también contienen ácidos grasos poliinsaturados, esencialmente bajo la forma de omega 6. Atención, no todos son iguales. Si una loncha de jamón (50 gramos) sólo contiene 5 gramos de lípidos, la misma cantidad de salchichón contiene más de 20 gramos… De modo que ojo con los excesos, la mayoría de los embutidos son extremadamente grasos y es mejor erradicarlos de la dieta si se tiene colesterol alto.

Un dato alentador: algunos ofrecen mucha cantidad de hierro y vitaminas del grupo B.

Están llenos de aditivos y de conservantes

En la zona de charcutería encontramos de todo y a todos los precios. Algunos embutidos se hacen de manera artesanal y a partir de ingredientes seleccionados cuidadosamente. Otros, más comunes, contienen estabilizantes, colorantes, conservantes y demás aditivos.


Hay un mundo entre un jamón Pata Negra y el que se vende envuelto en celofán o entre una salchicha de Francfort y una de paquete… A veces, el tipo de embalaje y el punto de venta del producto ofrecen una pauta sobre su calidad. En el supermercado, las denominaciones y las etiquetas permiten elegir con conocimiento de causa.

La mención “superior” indica simplemente que el producto tiene más cantidad de productos nobles y menos aditivos que los estándar. Para que se califiquen de “tradicionales”, los embutidos no deben contender ningún colorante y el número de aditivos debe ser muy reducido. Los “auténticos” precisan el origen geográfico del producto. Finalmente, la denominación “montaña” significa que las materias primas vienen de la montaña y que la fabricación tuvo lugar a muchos metros de altura.

Contienen mucha sal

Tradicionalmente, la sal se utiliza como conservador y para realzar el sabor. Los embutidos más salados son el jamón crudo, que contiene 6,5 gramos de sal por cada 100 gramos de producto, y el salchichón, con 4 gramos por cada 5,5. El paté y el resto de los embutidos cocidos (jamón, salchichón, lacón, lomo) tienen una cantidad de sal cercana a los 2, 5 gramos por 100 de producto. Los embutidos contribuyen a subir los niveles de sal y el exceso es nefasto para la salud. Las cantidades de sal recomendadas hoy en día se sitúan entorno a los 6 o los 8 gramos diarios. Un consejo a la hora de comerlos: no salar el resto de alimentos que acompañen el plato.

Fuente: yahoo.com

miércoles, 20 de octubre de 2010

Canelones rellenos de manitas de cerdo

Hay mil formas diferentes de cocinar unos buenos canelones con sus propias particularidades, que la separan de la forma de hacer del resto y que la convierten en única por su variedad. Este es un plato que cuenta con más de  500 años de historia. 

Amasar sal, harina y huevo, dándole la forma cuadrada tan característica, que una vez hervida, se enrolla y rellena al gusto: Es precisamente en las mil posibilidades de relleno que ofrece donde reside la clave de su éxito. Los canelones gozan de un amplísimo recetario que con el paso del tiempo ha ido cuajando en las cocinas europeas y muy pronto se comercializó en masa.

La salsa bechamel es también parte importante del canelón y puede realizarse de otras tantas formas diferentes, con aromas, texturas y sabores diferentes.

La receta que hoy os propongo la descubrí gracias al popular cocinero y amigo Manolo Rincón en el programa de televisión que hace algunos años presentaba en la televisión autonómica con un seguimiento expectacular de los andaluces, por su simpatía y complicidad con el público que solía acompañarle en plató, algo que por cierto, se convirtió en una experiencia pionera e innovadora en los programas de cocina de las televisiones en este país.



Canelones rellenos de manitas de cerdo

Ingredientes:
  • 4 manitas de cerdo
  • Pasta de canelones
  • Tocineta
  • Jamón serrano
  • Cebolla
  • Habas frescas
  • Tomate
  • Puerros
  • Zanahorias
  • Ajos
  • Aceite de oliva virgen extra de Jaén (zumo de oliva)
  • Pimienta y sal
A guisar:

En una olla ponemos a calentar 1 litro de agua junto con dos cucharadas de aceite y 1/2 cucharada de sal. Cuando empiece a hervir, echar los canelones de uno en uno y dejar cocer durante el tiempo que indique el paquete.

Cuando la pasta este cocida, sacarla e introducirla en un recipiente con agua fría para cortar la cocción y evitar que se ablanden demasiado. Dejarlos un minuto y sacarlos del agua fría. Dejarlos escurrir sobre de un paño limpio.

Mientras tanto, quemamos las manitas cortadas y las ponemos en la olla con tomate, zanahorias, pimienta y un puerro. Lo cubrimos de agua, salamos y lo dejamos hacer unas dos horas.

En una cazuela ponemos la cebolla junto con la tocineta, dejamos pochar y reservamos. Deshuesamos las manitas y las picamos en trozos muy pequeños. Las añadimos a la cazuela que teníamos reservada y lo rehogamos. Una vez templado rellenamos los canelones que tendremos preparados.

Rehogamos en una sartén habitas y un puerro cortado en juliana y reservamos. A continuación cocemos por separado las habitas y los puerros. Una vez cocidos ambos, los enfriamos. Reservar el agua de cocción de los puerros.

Para finalizar colocaremos en una placa de horno los canelones junto con el jugo de cerdo y los tendremos 15 min a 180°. Los servimos poniendo de camas las habitas.

jueves, 16 de septiembre de 2010

El queso y sus bondades

El queso es sin duda uno de los alimentos más importantes de nuestra dieta al ser un alimento nutritivo. El queso aporta al cuerpo calcio y proteínas indispensables, tanto como la carne, pero lo mejor sin duda, además de su sabor, es su variedad y sus múltiples formas de consumirlo.

En nuestro país existe una amplia gama de quesos en el mercado dependiendo de la forma en la que se elabore. De este modo podemos disfrutar de multitud de quesos diferentes que forma parte esencial dentro de la famosa dieta mediterránea.


El queso llegar a cubrir el 65% de las necesidades de calcio que necesita nuestro organismo. Para los vegetarianos que toman productos lácteos es un complemento indispensable en su dieta para compensar las proteínas de la carne. Los datos nutricionales del queso pueden variar en función de su contenido en grasa, pero en general se puede decir que es una rica fuente de calcio, proteínas, y fósforo. 100 gramos de queso manchego contienen 21 gramos de proteínas y entre 600 y 900 miligramos de calcio. Al tratarse básicamente de leche concentrada, hacen falta 600 gramos de leche para igualar esta cantidad de proteínas, y 550 gramos para la de calcio

Podemos usarlos de mil formas diferentes ya que son un complemento ideal para multitud de recetas y de platos. Ahora que estamos en verano podemos usarlos como un ingrediente más para aderezar las ensaladas,bueno, ahora y el resto del año.

Los que tienen un mayor porcentaje de agua, como la mozzarela, el queso de Burgos o el requesón tienen menos materia grasa, por lo cual engordan menos, pero que queréis que os diga, yo personalmente me quedo con uno de buena curación acompañado de una copa de vino.



Cuenta la historia que el descubrimiento del queso se le atribuye a un desconocido nómada que, viajando por el desierto del Medio Oriente, llenó sus bolsas de cuero, de leche, luego de varias horas de sol, descubrio que la leche se le habia convertido en un masa blanquecina y sólida. Su bolsa de cuero animal, el calor, y el movimiento del camello fueron los ingredientes básicos que se necesitan para hacer el queso.

Las primeras personas que fabricaron el queso vivieron en el medio Oriente hace mas de 4.000 años. En sus inicios, la importancia del que si dependia de si era capaz de mantenerse fresco largo tiempo.

Los quesos se agrupan deacuerdo con su dureza o suavidad. Sus cuatro tipos principales son; suave, semisuave, duro y muy duro. Los mas suaves contienen mas humedad que los otros , pero los más duros son los que se conservan mejor. Hoy dia existen mas de 4.000 tipos de queso en el mundo.

Estos son algunos de los quesos más comunes que consumimos en España:



  • Burgos: es castellano y está hecho con leche de oveja y/o vaca. Es bajo en calorías, por lo que es ideal para añadir a las ensaladas aquellas personas que quieran controlar su peso.
  • Camembert: de origen francés. Lo reconoceréos por su corteza ya que está cubierta por moho blanquecino.
  • Emmental: es un queso suizo. Llama la atención, además de por su sabor, por sus grandes agujeros. Ojo que este queso tiene un alto contenido en grasas.
  • Edam: es un queso holandés más conocido como "queso de bola" y está hecho con leche de vaca. Suave y delicioso.
  • Manchego: Que os voy a contar, está de lujo. Existen tres tipos de quesos manchegos diferentes: fresco, semicurado y curado, dependiendo del tiempo de maduración y es de leche de oveja manchega.
  • Mozzarella: es italiano, generalmente de leche de búfala, si bien también se puede elaborar con leche de oveja o vaca. Es fresco, de maduración corta y su contenido en grasas no es demasiado alto. Ideal para pizzas y ensaladas.
  • Parmesano: otro italiano con mucho sabor. Es rico en proteínas.
  • Tetilla: es de origen gallego y tiene forma de…eso, de tetilla.
  • Los quesos azules: está el roquefort o el cabrales, típico de Asturias, mi tierra. Su sabor es fuerte e intenso.
¡¡Que aproveche !!

Featured Posts